jueves, 12 de marzo de 2009

El medio es el mensaje: Cómo manipulan la realidad las grandes cadenas televisivas

Así como el medio es el mensaje (según la teoría de Mac Luhan) la TV es la masividad del mensaje globalizado a nivel planetario, y lo que no está en las pantallas de las grandes cadenas televisivas simplemente no existe.

Por Manuel Freytas (*)
manuelfreytas@iarnoticias.com

"Tensa espera y horas cruciales para la noticia que conmueve al mundo" decía el miércoles (antes del asesinato de Bhutto en Pakistán) el sobreimpreso titilando en la pantalla de la CNN.

Y dentro de un razonamiento lógico y escalonado un televidente se preguntaría ¿Estará por estallar la guerra EEUU-Irán? ¿Habrá invadido Turquía el norte de Irak? ¿Se habrá disparado el petróleo a mas de 100 dólares el barril? ¿Habrá estallado la recesión mundial? ¿Se estará por revelar que el crecimiento desmesurado de las ganancias y de las fortunas capitalistas ya ha dejado a miles de millones de personas en estado de pobreza o indigencia en todo el planeta? ¿Se estará por revelar que el desarrollo irracional de la industria capitalista privada ya ha destruido la mayoría de la fauna, la flora, los ríos y los mares de la tierra?

Nada de eso: el sobreimpreso y la cobertura "en vivo" de la CNN se refería a las "horas cruciales" que transcurrirían hasta que fuesen liberados tres rehenes de las FARC en Colombia.

Marshall Mac Luhan decía que "el medio es el mensaje", y el mensaje manipulado e impuesto masivamente por la CNN, la principal cadena mediática de habla hispana, era que la liberación de los rehenes de la FARC revestía una importancia "crucial" para el mundo.

Nadie sabe ni podría explicar racionalmente (incluidos los comentaristas y presentadores de la CNN) porqué la liberación de tres rehenes se puede convertir en objeto prioritario de "interés mundial", pero ése es el mensaje (el "producto final") que queda grabado en el cerebro desprevenido de los televidentes masivos.

¿En qué cambia la realidad política y social de América Latina la liberación de los tres rehenes por parte de las FARC? ¿Acaso modifica en algo la situación de Colombia? ¿Acaso modifica en algo la situación de la región? ¿Cuál es el valor estratégico de la noticia sobre la liberación de tres rehenes que la convierte en objeto "crucial" para el mundo?

Si se le preguntara a cualquier analista o periodista del sistema sobre cuál es la importancia estratégica que reviste para América Latina la liberación de tres rehenes de la FARC, seguramente se quedaría sin respuesta.

El "medio es el mensaje", y las cadenas televisivas son el primer eslabón (la usina generadora) de lo que luego la prensa internacional y los medios locales convierten en "noticia mundial": Lo que no ingresa en este circuito, simplemente no existe.

Y además de ser el "mensaje", la CNN, junto con las otras cadenas internacionales (que hegemonizan la comunicación masiva a nivel planetario) determinan lo que es "importante" (valoración de las noticias) y lo que es "secundario", además de decidir qué ingresa o no (selección de las noticias) en el flujo informativo diario.

A lo que es "importante" se le destaca cobertura especial (generalmente "en vivo") con gran despliegue de títulos, sonidos, imágenes y corresponsales, mientras que a lo "secundario" sólo se le destina un pequeño espacio sin relevancia en el "paquete informativo".

A fines de 2007, en un escenario mundial en el que se combinan interactivamente los fantasmas de una recesión mundial en puerta, una escalada simultánea de los precios del petróleo y de los alimentos que ya comienza a perfilarse a escala global, conflictos militares en desarrollo o a punto de un desenlace en Medio Oriente, Asia y África, y conflictos geopolíticos y económicos por áreas de influencia entre las potencias, las cadenas informativas y la prensa internacional (agencias, diarios y radios) han decretado que lo que "interesa al mundo" es la liberación de los tres rehenes de las FARC en Colombia.

Este statu quo "informativo" con el "canje humanitario" apenas fue quebrado por la "conmoción internacional" causada el jueves por el asesinato de Benzir Bhutto en Pakistán, pero continuaba este viernes con el apresto para recibir a los rehenes liberados.

Mientras a las matanzas diarias en Irak, Afganistán, Africa y Medio Oriente, o a los bombardeos turcos en el norte de Irak se les asigna un lugar "secundario" (pequeños espacios sin relevancia en las portadas en los titulares) las grandes cadenas han decidido que la "preocupación del mundo" (lo "importante") pasa estos últimos días del año por la liberación de los rehenes de las FARC en Colombia.

Los mismos consorcios mediáticos (locales e internacionales) que a diario manipulan y falsifican información sobre la situación de América Latina, o que a diario deforman la comprensión del proceso de concentración de riqueza en pocas manos y esconden la relación depredación capitalista = pobreza y exclusión social de más de 200 millones de latinoamericanos, de pronto descubren (y resaltan a través de títulos y de coberturas en "vivo) el carácter "humanitario trascendental" de la liberación de los tres rehenes de las FARC.

En el universo de las grandes cadenas informativas (moldeado a fuego en el cerebro de los televidentes) no imperan la lógica y el razonamiento sino los títulos y las imágenes elegidas por los que determinan lo que "es noticia" y lo que "no es noticia".

Esta ecuación define, a su vez, el poder hegemónico (sobre el cerebro de las mayorías) que detentan quienes manejan los niveles de decisión a la hora de valorar lo que es "importante" o lo que es "secundario" en el proceso informativo mundial.

Por medio del proceso de "valoración" y "selección" de las noticias las grandes cadenas mediáticas hacen que los hechos y los procesos "existan o no existan" (según le convenga a los intereses de establishment de poder económico que alimenta sus estructuras comerciales).

Así como las técnicas de manipulación mediática sirven para imponer y nivelar un "pensamiento único" (afín a los intereses del dominador) también sirven para esconder la realidad, crear cortinas de humo, y fabricar "atención social", o "indiferencia", ante los distintos acontecimientos locales o internacionales que se van sucediendo.

Las grandes cadenas, cuando quieren imponer un "eje de información" o de "noticia" lo imponen. Y lo imponen mediante una metodología: con repetición secuencial y con coberturas en vivo.

Si las grandes cadenas televisivas trasnacionales trasmiten una cobertura en vivo, imponen planetariamente la información a las cadenas y medios locales que la retrasmiten y potencian a las sociedades ubicadas en su área de influencia.

Así como el medio es el mensaje (según la teoría de Mac Luhan) la TV es la masividad del mensaje globalizado a nivel planetario, y lo que no está en las pantallas simplemente no existe.

En consecuencia, el "consumidor" de TV (el alienado programado) también se rige por un axioma elemental: si no está en la pantalla no existe.

Y como ni Irán, ni los precios del petróleo (el eje del desenlace estratégico de la crisis global que se avecina) ni las matanzas imperialistas en África, Asia y Medio Oriente, ni las estadísticas de pobreza y marginación mundial aparecen destacados (en coberturas "en vivo") por las pantallas o los titulares de las grandes cadenas informativas este fin de año, para el televidente nivel promedio estadístico simplemente esos procesos no existen.

Y se convierte en realidad la lógica de Mac Luhan: El medio es el mensaje.

Y el mensaje es el Imperio capitalista, así de sencillo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario