La máquina para poner fin a la guerra por Nickola Tesla

Tesla. "Parece", nos comenta, "que he ido siempre por delante de mi tiempo."

A Nikola Tesla, se le debe de llamar legitimamente el padre de la radio, la televisión, la transmisión de alta potencia, el motor de inducción, el robot, y el descubridor de los rayos cósmicos. Recientemente, se ha anunciado una desconocida fuente de energía presente en todas partes en cantidades ilimitadas.

Edison y Tesla eran rivales, la batalla fue ganada por Tesla que defendió a ultranza la corriente alterna. El sistema generador de energía eléctrica a través de las Cataratas del Niágara se baso en el sistema de Tesla. Edison era único para las invenciones prácticas de aplicación inmediata. Tesla, cuyas invenciones fueron siempre muy por delante de su tiempo, suscitó muchos antagonismos ocasionando un retrasado en la materialización de sus ideas durante años.

Sin embargo, grandes físicos como Kelvin y Crookes hablan de sus inventos como maravillosos. "Tesla", dijo el Profesor AE Kennelly de la Universidad de Harvard, que la medalla que se le dió a Edison cuando fue presentado como inventor, le pertenecía realmente a Tesla "ya que estableció los principios intrínsecos que mueven el mundo.... Lo que realmente desarrolló fue una revelación para la ciencia".

"Si nosotros," según BA Behrend, distinguido autor e ingeniero, "si nosotros no aprovechamos y eliminamos el desarrollo de la labor del Sr. Tesla, las ruedas de la industria dejarían de funcionar, nuestros coches eléctricos y los trenes se detendrían, nuestras ciudades se sumirian en la oscuridad, nuestros molinos estaría muertos e inactivos".

Sin sus ideas ningún hombre puede ir muy lejos en el futuro. El progreso y la invención no hubieran evolucionando en las direcciones previstas, y mucha tarea queda todavía por realizar en base a sus ideas.

Parece que siempre he ido por delante de mi tiempo. Tuve que esperar diecinueve años antes de que se aprovechara el Niágara, quince años tuve que esperar antes de que se reconociera mis ideas sobre sistemas inalámbricos, las invenciones que he dado al mundo en 1893 son de aplicación universal. Anuncié los rayos cósmicos y mi teoría de las ondas de radio en 1896. Uno de mis descubrimientos más importantes es la resonancia terrestre que es la base de la tecnología inalámbrica de transmisión de potencia y que anuncie en 1899, y que no se entiende todavía hoy día. Casi dos años después de que hubiere desarrollado mis teorias sobre la corriente eléctrica en todo el mundo, Edison, Steinmetz, Marconi y otros declararon que no sería posible la transmisión inalámbrica de señales, y mucho menos al otro lado del Atlántico.

Después de haber dado a conocer tantas novedades importantes, hoy día podemos decir en pleno siglo XXI que Tesla tenía razón.

La vida es y seguirá siendo siempre una ecuación capaz de encontrar una solución, pero contiene algunos factores conocidos que lo dificultan. Nosotros podemos decir definitivamente que es un movimiento, incluso si no comprende su naturaleza. Implica un movimiento de un objeto que está siendo movido y una fuerza que impulsa en contra de la resistencia. El hombre, en general, es pura masa impelido por una fuerza. Por lo tanto las leyes generales que rigen el movimiento en el ámbito de la mecánica son aplicables a la humanidad.

Hay tres formas en que la energía determina el progreso que el ser humano puede realizar: En primer lugar, puede aumentar la masa. Esto, en el caso de la humanidad, significa la mejora de las condiciones de vida, de la salud, la eugenesia, etc. En segundo lugar, puede reducir ayudar a reducir las fuerzas de fricción que impiden el progreso, como la ignorancia, la locura y el fanatismo religioso. En tercer lugar, podemos multiplicar la energía de la masa humana uniendolas con las fuerzas del universo, como las de el sol, el mar, los vientos y las mareas.

El primer método conduce a una mejora de la alimentación y el bienestar personal. La segunda tiende a lograr la paz. La tercera mejora nuestra capacidad de trabajo y de conseguir los objetivos. No puede haber progreso si esto no está constantemente dirigido hacia la mejora del bienestar, la paz y el progreso. Aquí la concepción mecanicista de la vida es una de las enseñanzas de Buda y del Sermón de la Montaña.

Si bien no soy un creyente en el sentido ortodoxo, encomio la religión, en primer lugar, porque cada persona debe tener algún ideal religioso, artístico, científico o humanitario, para dar significado a su vida. En segundo lugar, porque todas las grandes religiones contienen prescripciones sabias relativas a la conducta de la vida, si estas se llevaran a cabo tal como fueron realizadas cuando fueron promulgadas.

No existe conflicto entre el ideal de la religión y el idealización de la ciencia, pero la ciencia se opone a los dogmas teológicos porque la ciencia se basa en los hechos. Para mí, el universo no es más que una gran máquina que nunca llegó a existir y que nunca terminará. El ser humano no es una excepción al orden natural. El hombre, al igual que el universo es una máquina. Nada entra en nuestras mentes o determina nuestras acciones, que no este directamente o indirectamente, relacionada con una respuesta a los estímulos golpeando a nuestros órganos de los sentidos desde el exterior. Debido a la similitud de nuestra construcción y a la igualdad de nuestro medio ambiente, podemos responder de la misma manera a estímulos similares, y llegar a la concordancia de nuestras reacciones, a la comprensión. Con el paso de los años, los mecanismos de la infinita complejidad se completan, pero lo que llamamos "alma" o "espíritu", no es más que la suma del funcionamiento del cuerpo. Cuando este deja de funcionar, el "alma" o el "espíritu" abandona el mismo.

He dado a conocer estas ideas mucho antes que los behavioristas, dirigidos por Pavlov en Rusia y por Watson en los Estados Unidos, que proclamaron sus nuevas concepciones. Esta concepción mecanicista al parecer no es antagónica a una concepción ética de la vida. La aceptación por parte de la humanidad en general de estos principios de no destruir los ideales religiosos. Hoy en día el budismo y el cristianismo son las mayores religiones, tanto en su número de discípulos y como en importancia.

La higiene, la cultura física serán reconocidas como ramas de la educación por parte del gobierno. El Secretario de Educación Física o el de higiene era mucho más importante en el gabinete del Presidente de los Estados Unidos entrados en el siglo XXI que el propio secretario de guerra. La contaminación de nuestras playas, tal como existe hoy sera impensable ya que se tomarán medidas para que nuestros hijos y nietos tengan un mundo como es debido. Nuestro abastecimiento de agua será supervisado cuidadosamente, y será un loco el que beba agua no esterilizada.

Mas personas mueren o crecen enfermos a causa de agua contaminada a través del café, té, tabaco y otros estimulantes. Yo mismo evito todos los estimulantes. También prácticamente me abstengo de la carne. Estoy convencido de que dentro de un siglo el café, el té y el tabaco dejaran de estar en boga. El alcohol, sin embargo, seguirá siendo utilizado. No es un estimulante, sino un verdadero elixir de la vida. La supresión de los estimulantes no se impondrá a la fuerza. Estos son simplemente un sistema de moda que envenena. Bernarr Macfadden ha demostrado cómo es posible proporcionar alimentos sabrosos sobre la base de productos naturales como la leche, la miel y el trigo.

Habrá suficiente trigo y productos de trigo para alimentar a todo el mundo, incluidos los millones de habitantes de China y la India, ahora crónicamente al borde de la inanición. La tierra nada en la abundancia, el nitrógeno procedentes de la atmósfera refertiliza su suelo. He desarrollado un proceso para tal fin en 1900. Que se perfeccionó catorce años más tarde por parte de unos cientificos alemanes en la guerra.

Mucho antes de que amanezca el próximo siglo, la reforestación sistemática y científica de la gestión de los recursos naturales supondrá el fun de todas las devastadoras sequías, incendios forestales, y las inundaciones. La utilización universal de la energía hidráulica y su transporte a larga distancia de cada hogar con la oferta de energía barata y prescindir de la necesidad de quemar combustible.

Hoy en día, la mayoría de los países civilizados del mundo gastan cuantiosas cantidades de dinero en la guerra y un mínimo en educación. El siglo XXI se invertirá este orden. Será más gloriosa la lucha contra la ignorancia que tener que morir en el campo de batalla. El descubrimiento de una nueva verdad científica será más importante que las disputas de los diplomáticos. Incluso los periódicos de nuestros días están empezando a tratar a los descubrimientos científicos y a la creación de nuevos conceptos filosóficos en las noticias. Los periódicos del siglo XXI darán un simple "cerrojazo" a las páginas que hablan de la delincuencia, de la corrupción, de los poderes políticos, cobrando gran relevancia aquellas de carácter científico.

"No será posible acercarse a destruir cualquier cosa dentro de un radio de 200 millas. Mi invención proporcionará un muro de energía", declara Tesla.

Progresos a lo largo de estas líneas será imposible mientras que las naciones persistan en la salvaje práctica de matarse unos entre otros. Heredé de mi padre, un erudito hombre que trabajó duro por la paz, un gran odio a la guerra. Al igual que otros inventores, creí por un momento que la guerra podría detenerse. Pero me parecia que estaba equivocado. Me subestimó el instinto del hombre combativo. La guerra puede ser detenida, no por hacer de lo fuerte una debilidad, sino por hacer cada nación, débil o fuerte, capaz de defenderse.

Hasta ahora todos los dispositivos que pueden utilizarse para la defensa también pueden ser utilizados para la agresión. Esto anula el valor de la mejora para los fines de la paz. Pero la suerte de desarrollar una nueva idea de perfeccionar los medios y que puedan ser utilizados principalmente para la defensa. Si se aprueba, van a revolucionar las relaciones entre las naciones. Hará cualquier país, grande o pequeño, contra los ejércitos, aviones, y otros medios para el ataque. Mi invención requiere una gran planta, pero una vez que se haya establecido que se puede destruir cualquier cosa, sean hombres o máquinas, que se acerquen a un radio de 200 millas. Es, por así decirlo, la creación de una pared de poder, ofrecerá un obstáculo insuperable muy efectivo contra cualquier agresión.

Si ningún país puede ser atacado con éxito, no puede haber guerra. Mi descubrimiento termina con la amenaza de aviones o submarinos, asegura la supremacía en la guerra. Podría haber una guerra en el mar, pero ningún barco de guerra podría atacar con éxito la línea de costa.

Quiero decir expresamente que este invento no contempla la utilización de los denominados "rayos de muerte." Los rayos no son aplicables porque estos no pueden ser producidos en cantidades suficientes y disminuyen en intensidad rápidamente con la distancia. Toda la energía de la ciudad de Nueva York (aproximadamente dos millones de caballos de fuerza) y transformados en rayos proyectados a veinte millas, no puede matar a un ser humano, porque, de acuerdo con una conocida ley de la física, se dispersan de tal manera que son ineficaces.

Mi aparato de partículas que puede ser relativamente grande o de dimensiones microscópicas, y nos permite transmitir en un área pequeña o a una gran distancia billones de veces más energía que con rayos de cualquier otro tipo. Muchos miles de caballos de fuerza puede ser transmitidos. Esta maravillosa función que es totalmente posible, entre otras cosas, para lograr cosas inimaginables anteriormente como la televisión.

No digo que no puedan existir varias guerras destructivas. Yo no vivire para ver su aceptación. Pero estoy convencido de que un periodo de la vida a partir de ahora todas las naciones seran salvas de los ataques gracias a mi dispositivo o por otro dispositivo basado en un principio similar.

En la actualidad estamos sufriendo los desarreglo de nuestra civilización, ya que aún no se han ajustado completamente a nosotros. La solución de nuestros problemas no reside en la destrucción, sino en el dominio de la máquina.

Aún innumerables actividades realizadas por la mano del hombre de hoy se llevarán a cabo por autómatas. En este mismo momento los científicos que trabajan en los laboratorios de las universidades norteamericanas están tratando de crear lo que se ha descrito como una "máquina de pensar".

Hoy en día, el robot es un hecho aceptado, pero en principio no se ha presionado lo suficiente. En el siglo XXI el robot tomará el lugar que ocupan la mano de obra esclava de la antigua civilización.