Es el propio modelo económico global el que está en crisis.
Seguramente habrá quien piense que la crisis es el propio
sistema. A decir verdad, la crisis es el estado normal de funcionamiento
del modelo. Así ha sido desde el principio. No puede
ser de otro modo cuando dicho «proyecto económico», por
llamarlo de algún modo, se cimenta en el crecimiento infinito
en un espacio finito como es el planeta Tierra, la casa común
que nos acoge.
Es el propio modelo económico global el que está en crisis. Seguramente habrá quien piense que la crisis es el propio sistema. A decir verdad, la crisis es el estado normal de funcionamiento del modelo. Así ha sido desde el principio. No puede ser de otro modo cuando dicho «proyecto económico», por llamarlo de algún modo, se cimenta en el crecimiento infinito en un espacio finito como es el planeta Tierra, la casa común que nos acoge. Y ahora vemos y sufrimos sus consecuencias.Alguien dirá que no hay más que ver el estilo de vida occidental o los progresos de la civilización occidental para ver que “nunca hemos vivido mejor”. Precisamente observando dicho “estilo de vida” entendemos que vivimos en una burbuja, un modelo de alienación psíquica, insostenibilidad ecológica, injusticia social -sólo una minoría puede vivir en el despilfarro-. Urge revisar qué consideramos progreso, bienestar, calidad de vida, porque me temo que estos sólo podemos hacer que perduren en el tiempo, que sean sostenibles -que se sostengan por sí mismos hacia el infinito- dando un giro a nuestro sistema de vida y apostando por valores como la austeridad, el reducir la velocidad de nuestro ritmo de vida y de la economía, el ahorro y la eficiencia energética, el consumo en función de necesidades.
Podría seguir y seguiré en otras ocasiones pero creo que este último concepto puede bien servirnos de villancico navideño, no se me ha ocurrido nada mejor, no tengo ánimo para ello. Sean felices estos días navideños, intenten practicar la esperanza del cambio. Y no se pierdan el video “The story of stuff”, gran éxito de 2009 que ahora tiene subtítulos en castellano. Todo sobre nuestra economía tóxico-consumista: Para cambiar de sistema en vez de clima, como me escribe quien me lo envía.
Más info: El libro La salud que viene. Nuevas enfermedades y el marketing del miedo (Península, 2009) contiene un epílogo titulado La esperanza brota de la crisis que abunda en esta línea.
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